jueves, 24 de enero de 2008

Sin Clío

Pues nada, que no pasa nada, sólo las horas y las letras no salen. No encuentro las ideas. Ni siquiera puedo escribir una entrada para este blog que nadie visita. No carezco de palabras de aliento. Tampoco me falta la ilusión de ver esto terminado, es sólo que no puedo, así sin explicación, no puedo. Se me acabaron los pretextos. No hay ninguno que valga la pena, ninguno que merezca decirse en voz alta, ya no, no a estas alturas, ninguno me salva. Me estoy quedando sin York, sin clases en la universidad, sin fondos para las promesas. Aún así, la gente me sigue creyendo. Que asco me doy a veces.